domingo, 8 de febrero de 2009

Villamaniscle - Requesens
















Treinta kilómetros se pueden hacer de muchas maneras, la que más me gusta con diferencia es medio corriendo medio andando, sin prisa pero sin pausa, disfrutando del paisage, de los olores y los colores de la montaña, haciendo fotos y además con buena compañía. Una mañana completa; luego hemos visitado el castillo de Requesens, impresionante por fuera y algo abandonado por dentro, a destacar la tarta de santiago de MªJose y el chocolate de Montse. Lo peor el viento y el frio (casi me roba el gorro), lo mejor la compañía de MªJosé, Montse, Conchi, Juan Antonio, Jose, Felix y Esteve. Por cierto, si vais con Jose por l´Empordà, no le dejeis que pregunte, lo engañan como a un chino.