No se por donde empezar, hacerlo por el principio quizás sea muy cansado, no pienso explicar, lo que supone prepararse mínimamente para hacer 42 kilómetros por montaña a toda ostia. El final fue lo mejor, emocionante, muy emocionante, la lágrimas de la Princesa nos contagiaron a todos, entró de la mano de Geiper-man y de Culoinquieto, que más podía pedir, que más podemos pedir nosotros. En la salida cuando vi a los participantes y me miré ya me empecé a oler que no íbamos a ganar, un montón de figurines y yo escondiendo bartolilla. Pero nosotros sabemos sufrir, a eso no nos gana cualquiera. me acuerdo de pequeños detalles, el bajón del kilómetro 10, 20, 30 y 40, los bellos paisajes y sobre todo la última cuesta, con un desnivel del 33 %, estos vascos no se andan con tonterías en los finales de etapa, pero nosotros teníamos dándonos aliento a Puri, Mari y Manolín, ellos nos dieron las fuerzas que nos faltaban (a mi hermana y a mi, Jose come aparte). En fín, ya he hecho mi primera maratón( seis horas sin fumar), con dos cojones!!. Ya te lo dije Princesa, nuestra familia los tenemos bien puestos. Ahora a descansar y luego a empezar a pensar en la siguiente gozada, de momento no pienso mucho pero tengo pendiente el siguiente tramo del GR 92, ir a Montserrat caminando desde casa y alguna cosilla más. Todo se andará, la vida es larga si caminamos despacito.
