Ayer se hizo realidad un viejo sueño, subir al Pedraforca, hace más de 20 años me estrené en el excursionismo yendo desde Guardiola a Gósol caminando, desde entonces tenía pendiente ese reto. Tengo una larga lista de agradecimientos, la compañía fue exquisita, tanto por los que conocí como por los que ya conocía. Me siento afortunado, ya os estoy echando de menos.
Esta mañana hemos ido a animar a más de 6000 mujeres a la Cursa de la dona, entre ellas estaban mis dos hijas, no son grandes atletas y no les encanta correr, se que un poco lo han hecho por mí, eso me llena de alegría y orgullo. Ojalá esos más de 6000 granitos de arena sirvan para algo.